Hoy el presidente electo de EE.UU., Donald Trump, reconoció que Rusia estuvo detrás de los ciberataques efectuados en el proceso electoral que culminó con los comicios del 8 de noviembre. "'Hackear' es malo, no tendría que haber ocurrido", afirmó Trump en una rueda de prensa en Nueva York, refiriéndose a los informes de inteligencia que señalan que los ataques cibernéticos rusos pudieron beneficiar al aspirante presidencial republicano.
"Sobre el 'hackeo', creo que fue Rusia", añadió, en una posición que cambia opiniones anteriores en las que se mostraba poco reacio a aceptar que Rusia estuviera detrás de estas acciones de pirateo informático, que afectaron especialmente al bando demócrata.